Colas de langosta al ajillo

La cola de langosta es la zona que tiene más carne en este marisco. Puedes hacerla de diversas maneras. Horneadas, gratinadas, hervidas, asadas o al vapor, por ejemplo. Pero hoy te traigo una receta exquisita al ajillo.

Además, la acompañaremos con una ensalada marinada con vinagreta y unas rebanadas de pan bien sazonadas. Toma nota. 

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• 2 colas de Langosta de 250 g cada una
• 2 dientes de ajo
• 2 manojos de cilantro y perejil
• 4 cucharadas de mantequilla
• Ralladura de ¼ de limón amarillo
• Rodajas de limón para decorar y afinar el sabor
• Pan Ciabatta, en su defecto baguette
• Un chorrito de aceite vegetal

1. Para comenzar, haremos una mezcla de mantequilla con hierbas para nuestras colas de langosta.
2. Junta el manojo de cilantro y perejil, y córtalos en trozos muy pequeños. Repite esto unas 3 veces.
3. Lo que sigue es pelar los ajos, quitarle la cola y picarlos muy finos y chiquitos.
4. Agrega la pizca de sal al ajo y sigue cortando varias veces hasta hacerlo bastante diminuto. La sal ayuda a que el ajo suelte el agua.
5. Añade la ralladura de ¼ de limón amarillo al ajo y sigue picando. Luego aplasta con el cuchillo para conseguir una masita.
6. A continuación, en un bol coloca las 4 cucharadas de mantequilla y llévala al microondas por 15 segundos o hasta derretirse.
7. Luego, incorpora a la mantequilla la mezcla de hierbas y ajo y remueve.
8. Agarra tu langosta y divídela al centro y a lo largo para una mejor cocción. El corte debes hacerlo sin llegar al otro extremo del caparazón.
9. Precalienta la paila y agrega un chorrito de aceite vegetal para que no se te queme la mantequilla.
10. Mientras calienta, puedes ir cortando tu pan Ciabatta o pan francés en rodajas.
11. Una vez ya precalentada la paila, es hora de freír las colas de langosta (sin sazonar) a fuego lento por unos 2 minutos cada lado. Colócalas con la abertura hacia abajo y bien abiertas presionando un poco.

1. Ya volteadas por un tiempo, incorpora en su abertura un poco de la mezcla de mantequilla con hierbas y asegúrate de que queden bien cubiertas.
2. Para que la mantequilla se derrita bien, apaga el fuego, eleva la paila y mueve un poco.
3. Luego agrega lo restante de la mezcla y enciende nuevamente la cocina a fuego lento. Con una cuchara ve tomando la mantequilla de la paila y baña tus langostas.
4. Pasado un tiempo voltéalas de nuevo y báñalas también para que la mantequilla se incorpore muy bien.
5. Dale vuelta y ahora sí, sazona con un poco de sal. Cuando veas que ya están doraditas es hora de sacarlas.
6. La mezcla que te quedó en la paila, la puedes usar para colocar tu pan Ciabatta y que absorba todos los sabores por ambos lados.

Nota: Bañar las langostas con la mantequilla es un proceso de unos 6 minutos por lado o hasta que la carne se separe del caparazón.

Para servir, forma una flor con la ensalada y tómala por abajo para pasarla por la vinagreta. Escurre un poco y colócala en el centro de tu plato.

Coloca a un extremo tu langosta y al otro el pan Ciabatta. Para finalizar, decora con las rodajas de limón. 

Ingredientes

• 2 cucharadas de vinagre de balsámico blanco
• 1 cucharada de agua
• 4 cucharadas de aceite vegetal
• ½ cucharadita de sal
• 1 cucharadita de azúcar
• Pimienta al gusto
• Ensalada mixta

Preparación

1. En un recipiente agrega las 2 cucharadas de vinagre de vino blanco seguido del agua.
2. Luego añade la ½ cucharadita de sal y un toque de pimienta molida al gusto.
3. Sigue con la cucharadita de azúcar y mezcla todo para que se diluya la sal y el azúcar. Prueba para saber si le falta azúcar o sal.
4. Procede con incorporar el aceite vegetal poco a poco mientras vas batiendo todo. Y ya está lista.
5. En otro recipiente, coloca la ensalada en hojas.

• Para el primer corte de la langosta haz presión con el cuchillo en un solo movimiento.
• Busca la forma de abrir el caparazón con un corte fuerte, rápido y limpio.
• Si las langostas son de ½ kilo o más, te recomiendo cocinarlas en agua con sal por unos 10 minutos. Después báñalas con la mantequilla en tu paila por 3 minutos o hasta que la carne se desprenda del caparazón.
• Es importante que la pila sea de teflón para que no se te pegue.